No dejes nunca de hacer cosas para conseguir tus sueños.

Hoy quiero recordarte que «no dejes nunca de hacer cosas para conseguir tus sueños«. De niño lo teníamos claro pero con el tiempo ese deseo se va esfumando hasta meternos en una cueva de oscuridad y parálisis.

El ser humano a lo largo de su historia ha sido capaz de imaginar muchas de las cosas que hoy podemos disfrutar como si siempre hubieran existido. La realidad es que todas estas cosas, antes de existir, tomaron forma en la mente de grandes mujeres y hombres que, gracias a tomar acción consiguieron llevarlas a cabo. Si nunca se hubieran puesto manos a la obra, el mundo tal como lo conocemos hoy día sería otro.

La acción es el ingrediente esencial para lograr cualquier cosa en la vida, tanto a nivel personal como profesional. Sin acción, todo son sueños y deseos que nunca se harán realidad.

Pero, ¿por qué es tan importante la acción?

Cuando tomas acción, estás dando un paso hacia tu objetivo. Estás avanzando, aunque sea un poco. Y cada pequeño paso te acerca más a tu meta. Esto conecta a modo de puente entre tu idea original y las cosas que empiezas a hacer para que ese pensamiento se materialice.

Por ejemplo, si quieres perder peso, no basta con decir «voy a empezar a comer sano y a hacer ejercicio«. Tienes que empezar a comer sano y a hacer ejercicio hoy mismo. Incluso si solo puedes hacer 10 minutos de ejercicio al día, es mejor que nada. El mínimo lo pones tú. Es importante bajar el objetivo hasta que de verdad no cueste dar ese pequeño paso.

Porque la acción te da confianza.

Cuando te enfrentas a un reto y lo superas, te sientes más capaz. Ganas confianza en ti mismo y en tus posibilidades. Y esta confianza te ayuda a seguir avanzando, incluso cuando las cosas se pongan difíciles. Recuerda que si flaqueas no pasa nada, retoma donde lo dejaste.

Por ejemplo, si quieres aprender a tocar un instrumento, no basta con decir «voy a apuntarme a clases de música«. Tienes que empezar a practicar hoy mismo. Incluso si solo puedes tocar durante 5 minutos al día, es mejor que nada.

Hacer cosas genera motivación

Cuando ves que estás avanzando, que estás consiguiendo resultados, te sientes motivado para seguir adelante. La motivación es la fuerza que te impulsa a seguir luchando por tus sueños.

Esta motivación activa un ciclo imparable que de alguna manera te va llevando en volandas hacia un nivel superior. Tienes la sensación de volar por encima de todos esos impedimentos que surgen al principio cuando todo se hace mucho más difícil.

¿Cómo empezar a tomar acción?

Lo primero que debes hacer es definir tus objetivos. ¿Qué quieres conseguir? ¿Cuáles son tus sueños?

Una vez que tengas tus objetivos claros, puedes empezar a planificar la acción que vas a tomar. ¿Qué pasos necesitas dar para alcanzarlos?

No te preocupes si tus objetivos parecen demasiado grandes o difíciles. Empieza por pequeños pasos(método Kaizen) que puedas dar hoy mismo. Y, a medida que vayas avanzando, podrás ir ampliando tus metas. Mira siempre hacía delante, el pasado ya no es importante para ti en este proceso. Recuerda que quieres transformar esas ideas que tienes en tu cabeza, por las cosas materiales que tanto anhelas conseguir.

¿Qué pasa si tengo miedo a fracasar?

El miedo al fracaso es una emoción normal que todos sentimos en algún momento. Sin embargo, no debemos dejar que este miedo nos impida actuar.

Recuerda que el fracaso es una parte natural del aprendizaje y del crecimiento. Todos fracasamos en algún momento. Te imaginas no poder andar hoy día porque cuando niño no eras capaz de mantenerte de pie. Lo importante es aprender del fracaso y seguir adelante.

¿Qué pasa si no sé por dónde empezar?

Si no sabes por dónde empezar, hay muchas personas que pueden ayudarte. Puedes hablar con un amigo, un familiar, un mentor o un profesional. Este podría ser tu primer paso.

También puedes encontrar mucha información en internet o en libros.

No estoy motivado. ¿Cómo puedo hacerlo?

Si te sientes desmotivado, recuerda por qué quieres alcanzar tu objetivo. Piensa en lo que ganarás si lo consigues. Visualiza el resultado.

También puedes buscar a alguien que te apoye y te motive.

Huye de la gente que te quita energía y que no entienden tus proyectos.

No pares nunca de hacer cosas.

¡No te rindas!

La acción es la clave del éxito. Así que, no te rindas. Sigue luchando, incluso cuando las cosas se pongan difíciles.

¡Tú puedes lograrlo!